Km: 678
Bajo a desayunar y me encuentro con una gran mesa
dispuesta como si la familia se dispusiera a desayunar. Me siento algo
incómodo. Por la mañana me gusta el silencio. Hablar, y por ende pensar, me
supone un esfuerzo titánico, y si tiene que ser en inglés o francés
chapurreado, la cosa empeora.
La familia hemos resultado ser el dueño de la casa, un huésped parisino llamado Gilbert, su madre, una anciana de 90 años y que funciona mejor que yo a estas tempranas horas y un servidor. Me sobrepongo a mi tendencia autista e iniciamos una conversación en inglés con Gilbert, que se sorprende por la extensión de mi viaje. Cuando me pregunta donde recabé información sobre el alojamiento, apenas puede creerse que lo encontré por casualidad. El dueño corrobora la casualidad al informarme de que pudo darme la habitación debido a que cancelaron una reserva tan sólo unos minutos antes de mi llegada. A toda esta información respondo que tenía que suceder así, pues ayer tenía la certeza de que todo me iba a salir mejor que bien. Me rio mientras Gilbert me mira de un modo extraño. Creo que duda entre creerme un chiflado o algo peor. Sin embargo, creo que le he caido bien.
La familia hemos resultado ser el dueño de la casa, un huésped parisino llamado Gilbert, su madre, una anciana de 90 años y que funciona mejor que yo a estas tempranas horas y un servidor. Me sobrepongo a mi tendencia autista e iniciamos una conversación en inglés con Gilbert, que se sorprende por la extensión de mi viaje. Cuando me pregunta donde recabé información sobre el alojamiento, apenas puede creerse que lo encontré por casualidad. El dueño corrobora la casualidad al informarme de que pudo darme la habitación debido a que cancelaron una reserva tan sólo unos minutos antes de mi llegada. A toda esta información respondo que tenía que suceder así, pues ayer tenía la certeza de que todo me iba a salir mejor que bien. Me rio mientras Gilbert me mira de un modo extraño. Creo que duda entre creerme un chiflado o algo peor. Sin embargo, creo que le he caido bien.
Gilbert. Aprendi algonas cosas de él. |
Pierdo un par de preciosas horas paseando en moto
por la comarca, de excepcional belleza. Me encuentro con una hípica y le
pregunto a la dueña si me permite pasear y tomar fotos por su propiedad. De
nuevo esa mirada de “¿de que va este tío?”, pero accede, halagada por mi
interés. Debo cambiar mi modo de afrontar el viaje o no llegaré al Cabo Norte
hasta el próximo solsticio, así que enfilo hacia la autorroute decidido a
aburrirme durante un montón de horas.
Al fin en Alemania, el paraiso de la velocidad. Me
sorprende ver que aun así, el firme de las autobahn está hecho un asco en
comparación con el del país vecino, voy cabalgando sobre la moto rebotando por
los baches del pavimento. Me doy cuenta del peligro de estar acostumbrado al
límite de los 120 km/h. Un puntito en el retrovisor se convierte en un alemán
pegado a tu culo en una fracción de segundo. Hay que pensar en eso antes de
planear un adelantamiento a una fila de camiones. De vez en cuando, todos
aminoran la marcha y se ponen a 80... ah, si, veo la señal. Seguidamente, todos
se lanzan a volar de nuevo, no consigo ver si se debe a la presencia de otra
señal o bien es la ausencia de estas lo que les otorga la patente de corso para
poner el coche a todo lo que pueda dar. ¡Qué envidia! No sé a cuanto van, pero
yendo yo a 140, me han pasado tipos que iban mucho, mucho más rapido.
Observo que aquí a la gasolina le añaden un 5% de
bioalcohol. No sé si eso será bueno o malo par la bicha, pero con el tute que
le estoy dando, creo que bien se merece una copita.
de 5 tenedores... |
Finalmente, hecho polvo, me paro en un motel de la
autobahn, cerca de Kassel. Tengo ganas ya de dejar atrás las superpobladas
autopistas francoalemanas, trataré de llegar mañana a Suecia.
En contra de lo previsto en este viaje
introspectivo, resulta que el 95% del tiempo que paso en la autopista no hago
más que pensar en gilipolleces o cantar, gritar o lo que sea para combatir el
sueño y el cansancio. Aún así, hoy he llegado a algunas conclusiones
interesantes. Pegarse palizones en moto por una autopista es básicamente un
muermo insoportable. Entonces, ¿porqué lo hago? ¿Qué necesidad hay de ir tan
lejos? ¿No podría sentir lo mismo en una ruta por el Pirineo, sin hacer sufrir
tanto a la mecánica y a mis huesos? Pues no. Cuando lo que pretendes es
empequeñecer problemas, no hay nada mejor que irse bien lejos. Cuanto más,
mejor. Puedes ver como éstos van desapareciendo en el retrovisor, incapaces de
seguir tu ritmo. A medida que te vas alejando, vas adquiriendo una nueva
perspectiva. Llegan a ser tan insignificantes que hasta podrías aplastarlos con
la bota. Pero lo mejor es cogerlos, y en la palma de tu mano, ver cómo patalean
como pequeños insectos, mientras tu estás ahí, enorme y vivo, muy vivo, y te
guardas el problemilla insignificante en el bolsillo.
¿Y porqué hacer algo así en solitario? ¿No es
mejor disfrutarlo en compañía? Pues tampoco. Viajo en solitario para crecer,
para pensar, para meditar, para aburrirme, para acompañarme. Vedlo como un
viaje para aprender un idioma. Si te llevas compañía, no aprenderás ni la
mitad. Hacerlo solo es más duro, pero hablarás el idioma en dos meses.
Dos dias sin fotos... internet aquí va leeeeeentooooo
ResponEliminaПривет Ricard! Как дела? Хави сказал мне что ты не настолько умный, чтобы перевести это сообщение, чтобы обнаружить, что это не шутка. Надеюсь, что у тебя всё хорошо, до следующей связи, если ты понял это сообщение
ResponEliminaЖелаем удачи.
Элина и Хави
Привет Элина!
EliminaРасскажи Хави не должны недооценивать моего высший разум. Обнять Хави и поцелуй для вас сейчас, что Хави не видит меня.
Uauuu totalmente enganchada a tus relatos, es como estar allí! Sigue contando! Un abrazo. Sombreta
ResponEliminaSi señora, "todos queremos más..."
EliminaEsa sombreta me suena... Si vierais la cantidad de hipicas que hay aqui... es otra cultura equina, sin duda. Un abrazo!
EliminaРасскажи Хави не пренебрегай моей Фармацевт неумолимого, что даже и быть плакса слабак не хватает интеллекта, большой поцелуй в два, а слово, которое не взорвать все это, чтобы фармацевт.
ResponEliminaУдачи вам тоже, надеюсь увидеть вас в ближайшее время.
Переводчик Google сделал беспорядок с этим сообщением ... Это смех!
Eliminaобнять
Я вижу, что многие русские здесь .....
ResponEliminaHola Ricard, yo sabia que tu lo vas a traducir, pero el Xavi me ha dicho que si el hubiera a recibido un mensaje parecido a este, no lo haria... Espero que disfrutas mucho del viaje Ricard y si te apetece seguir escribir en ruso, ya sabes....
ResponEliminaTe seguimos
Muchos abrazos y cuidate mucho!!!
Sigue la travesía del boticario-psicópata por tierras europeas. Superada Francia donde se lo busca por todas partes, nuestro siniestro protagonista alcanza carreteras alemanas, donde de momento nadie lo busca. Elige viajar por las enormes, veloces y anónimas autopistas germanas. Testigos presenciales han declarado ver a un tipo en una moto pasarlos a toda velocidad por el costado, gritando palabrotas dentro de su casco, haciendo los cuernos con la mano izquierda, y sacando la lengua por debajo de su casco, a modo del integrante del famoso grupo Kiss. A pesar que lo intenta no encuentra muchos perros para arrollar, y para saciar su maldad lo reemplaza tiranado clavos en el carril rápido de la autopista. Provoca varios accidentes mortales de tipos que montados en sus Porsches y Mercedes, revientan sus neumáticos a mas de 300 por hora. Su risa resuena nuevamente...
ResponEliminaMientras tanto la Gendarmerie encuentra el cadaver de la anciana de 90 años, para horror de Gilbert, quien dice: "Ya me pareció raro ese tipo con su viaje disparatado", unos kilómetros mas allá la dueña de la hípica colabora con la policía para hacer un retrato robot del hombre mas buscado en Francia. Pedro J pone a su equipo de investigación a trabajar en esta historia, ni Bárcenas, ni el asunto de los ERE ni nada nos hará vender mas diarios que la historia del loco con su moto por Europa. Continuará...
Pero Juankaaaaaaaa... se te fue la pinza. Vaya dos compañeros de aventuras literarias, jajaja. El curso que hicisteis con Beatriz os hizo mucha pupa, jajajaja!!!
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